- Por primera vez, un equipo de paleontólogos encuentra un yacimiento repleto de los restos de los animales que sucumbieron apenas unas horas después del impacto
Robert Depalma |
Un equipo de paleontólogos de la Universidad de Kansas acaba
de hacer público el hallazgo de un yacimiento excepcional. Por primera vez, en
efecto, se han encontrado víctimas directas del impacto que hace 66 millones de
años acabó con la vida de los dinosaurios y del 75% de todas las especies vivas
de la Tierra. Los animales de ese yacimiento murieron, todos, durante las
primeras horas de la catástrofe.
El estudio, que acaba de aparecer en Proceedings of the
National Academy of Sciences ofrece, pues, una "instantánea"
detallada de los terribles momentos que siguieron al impacto de Chicxulub, el
más destructivo, que sepamos, de cuantos se hayan producido en nuestro planeta.
Cuentas de vidrio. |
El lugar se llama Tanis, y se encuentra en la formación
montañosa de Hell Creek, en Dakota del Norte. Allí, los paleontólogos hallaron
una gran cantidad de fósiles de peces y otros animales exquisitamente
conservados. Criaturas que vivían en y alrededor de un río profundamente
cincelado en el paisaje y conectado directamente con un antiguo mar interior
que quedó destruido de inmediato tras la caída del asteroide.
El principio del fin fue un violento temblor que levantó
olas gigantes en las aguas de ese mar hoy desaparecido. Inmediatamente después,
millones de pequeñas cuentas de vidrio incandescente, cristalizadas por el
tremendo calor de la colisión, empezaron a caer desde el cielo. La lluvia de
cristales fue tan intensa que incendió de golpe gran parte de la vegetación en
tierra. En el agua, los peces luchaban por respirar mientras esas "perlas
mortales" obstruían sus branquias.
Un muro de agua de 10 metros
El agitado mar se convirtió en un muro de agua de más de
diez metros de altura que avanzó rápidamente hacia la desembocadura fluvial,
arrojando a millares de peces de agua dulce hacia un banco de arena e
invirtiendo temporalmente el flujo del rio. Atrapados por el agua en retroceso,
los peces y otros animales fueron, literalmente, acribillados por cuentas de
vidrio de hasta 5 mm de diámetro. Muchos quedaron enterrados en el barro. El
diluvio de rocas, arena y perlas de vidrio continuó, por lo menos, durante 20
minutos.
El principio del fin fue un violento temblor que levantó
olas gigantes en las aguas del mar - Robert De Palma / Vídeo: El asteroide
Chicxulub calentó la Tierra durante 100.000 años
Justo después, una segunda y gigantesca ola inundó la costa
y cubrió a las víctimas con grava y sedimentos, sellándolos y preservándolos
durante 66 millones de años. En este cementerio fosilizado y único, los peces
se amontonan uno encima de otro y se mezclan con troncos de árboles quemados,
ramas de coníferas, mamíferos muertos, huesos de dinosaurios, insectos, la
carcasa parcial de un Triceratops, microorganismos marinos y amonitas. Y todo
ello fue encontrado por el paleontólogo Robert DePalma, y pacientemente
desenterrado tras seis largos años de trabajo.
"Se trata del primer conjunto masivo de organismos
muertos asociados al límite KT -asegura DePalma-. En ninguna otra sección del
límite KT en la Tierra (la frontera geológica que marca la gran extinción
sucedida entre el Cretácico y el Terciario, o Paleógeno) es posible encontrar
una colección de este tipo, que consiste en un gran número de especies
diferentes y con ejemplares que representan diferentes edades y etapas de la
vida de los organismos. Y todos ellos murieron al mismo tiempo, el mismo
día".
Un museo del Cretácico en metro y medio
Rober DePalma |
En palabras de Mark Richards, investigador de la Universidadde Berkeley que hace 40 años postuló, junto a Walter Alvarez, que la extinción
KT se debía al impacto de un meteorito, el yacimiento "es como un museo
del fin del Cretácico en una capa de metro y medio de espesor".
Según DePalma, el hallazgo describe a la perfección cómo el
impacto podría haber devastado muy rápidamente extensas áreas muy lejos del
cráter. "Un tsunami -explica el investigador- habría tardado por lo menos
17 horas, o más, en llegar aquí desde el cráter, pero las ondas sísmicas sí que
pudieron llegar en pocas decenas de minutos".
En su artículo, los investigadores explican que incluso
antes de que llegara la ola, los peces acipenseriformes (esturiones) encontrados
en el lugar ya habían inhalado pequeñas esferas de cristal expulsadas por elimpacto de Chicxulub.
"Los peces -explica David Burmham, coautor del estudio-
quedaron enterrados rápidamente, pero no tan rápido como para que no tuvieran
tiempo de inhalar la eyección que llovía sobre el río. En el fondo, lo
respiraron mientras nadaban en la columna de agua. Hemos encontrado pequeñas
piezas de la eyección en los soportes óseos de las branquias de estos peces. No
sabemos si algunos de ellos llegaron a morir también al respirar esos
materiales".
"La sedimentación ocurrió tan rápidamente -prosigue
Burmham- que todo se ha conservado en tres dimensiones, sin aplastar. Es como
una avalancha que se precipita como si fuera un líquido y que después se
solidifica. Los animales murieron de forma repentina debido a la violencia del
agua. Tenemos incluso un pez que se golpeó contra un árbol y quedó partido por
la mitad".
Heredamos el planeta
Para Burmham, estamos ante un auténtico "tesoro
fósil" que llena un vacío del que antes apenas si teníamos nada. "Ya
sabíamos que tras el impacto sucedieron cosas malas, pero nadie hasta ahora
había encontrado este tipo de evidencias. Sabíamos que el impacto mató a los
dinosaurios, pero la gente se preguntaba por qué no había cadáveres por todas
partes. Bueno, ahora los tenemos. No son dinosaurios, pero creo que con el
tiempo también aparecerán".
La calidad de los fósiles es extraordinaria. "Algunos
de ellos parecen ser nuevas especies -asegura DePalma- y otros son los mejores
ejemplos conocidos de su tipo".
"Resulta difícil no emocionarse y apasionarse por este
tema -añade el científico-. Estamos viendo registros minuto a minuto de uno de
los eventos de impacto más notables en la historia de la Tierra. Ningún otro
lugar cuenta con un registro como este. Y este evento en particular está
relacionado directamente con todos nosotros, de hecho, con todos los mamíferos
de la Tierra. Porque aquí es esencialmente donde heredamos el planeta. Nada fue
igual después de ese impacto. La Tierra pasó a ser un mundo de mamíferos en
lugar de un planeta de dinosaurios. Como seres humanos, descendimos de un
linaje que literalmente sobrevivió en las cenizas de lo que fue el glorioso
reino de los dinosaurios".
No hay comentarios:
Publicar un comentario