Una tomografía computerizada practicada al fósil de una fíbula -equivalente al peroné humano- de un terópodo espinosáurido- recuperada en 2005 en Igea (La Rioja), trata de confirmar si este dinosaurio carnívoro se movía cojeando por una patología o por otro motivo e, incluso, si podría tratarse de una nueva especie.
Investigadores hacen una tomografía computerizada al fósil de una fíbula. EFE/ Raquel Manzanares |
Este hueso, que es la fíbula izquierda, ubicada entre la
rodilla y el tobillo, muestra una deformación en forma de "s" y, por
su apariencia exterior, da la impresión de que se fracturó y, posteriormente,
se volvió a soldar en vida del animal, tras lo que se pudo formar un callo
óseo, han indicado.
Si esta "interesante hipótesis de trabajo" se
confirma con esta tomografía, se podrá hacer una publicación al respecto
porque, según Pereda, proporcionará mucha información sobre el modo de vida de
este dinosaurio en concreto e, incluso, corresponder a un nuevo individuo de
una nueva especie aún por definir.
Esta tomografía permitirá conocer si el animal
interaccionaba con otros ejemplares de la misma o de diferentes especies y
lograr un mejor conocimiento del modo de vida del dinosaurio.
Fósil de una fíbula -equivalente al peroné humano- de un terópodo espinosáurido recuperada en 2005 en Igea (La Rioja). EFE/ Raquel Manzanares. |
Según Pereda, los animales y el ser humano pueden enfermar y
lesionarse y, a día de hoy, se sabe que algunas de las enfermedades que padecen
las personas ya las sufrieron los dinosaurios en la antigüedad y lo mismo
sucede con las lesiones traumáticas, lo que explica esta investigación.
Esta nueva técnica y el registro fósil son, para
Sáez-Benito, la única vía principal a partir de la cual se puede obtener
información sobre la salud de los dinosaurios y, en este caso concreto,
determinar si realmente este que se estudia se fracturó la fíbula y, si es el
caso, puede pensarse que el individuo se movía cojeando a pesar de haber curado
la lesión.
¿UNA NUEVA ESPECIE DE ESPINOSÁURIDO?
Una de las hipótesis que también mantienen es que el animal
al que pertenece esta fíbula podría corresponderse con una nueva especie dentro
de los espinosáuridos, algo totalmente desconocido hasta la fecha y que sería
único para la ciencia.
Los espinosáuridos son un grupo muy particular de
dinosaurios carnívoros porque tienen una apariencia muy singular, un cráneo
bajo y alargado, que recuerda en algunos aspectos a los cocodrilos.
El equipo de investigación también se ha referido a que,
actualmente, a nivel de registro fósil en la Península Ibérica, hay muy pocos
casos registrados de patologías en dinosaurios carnívoros, por lo que esta
información es "muy interesante".
Fósil de una fíbula -equivalente al peroné humano- de un terópodo espinosáurido recuperada en 2005 en Igea (La Rioja). EFE/ Raquel Manzanares. |
Esto es muy importante, ha añadido, porque los restos
fósiles no son abundantes y cualquier destrucción o afectación de los mismos
sería una pérdida irrecuperable, que debe ser valorada cuidadosamente.
En este contexto, el equipo incide en que esta tomografía
computerizada podrá ayudar a conocer si se trata de una enfermedad padecida por
el dinosaurio, una deformación congénita o una tafonómica generada por
esfuerzos de cizalladura en materiales plásticos, como pueden ser arcillas.
La prueba se completa con un estudio anatómico de los
dinosaurios terópodos de Igea y su comparación con otros restos fósiles de la
Península Ibérica que actualmente realiza este equipo de investigación.
Se ha referido a que se conocen en diversos lugares del
mundo y en la Península Ibérica varios yacimientos con restos de
espinosáuridos, pero, en los últimos años, las excavaciones realizadas en Igea
han proporcionado bastante material perteneciente a este grupo.
Los yacimientos de Igea, municipio ubicado a unos 80
kilómetros de Logroño, están proporcionando gran cantidad de material de
espinosáuridos, por lo que, para estos investigadores, el resultado de esta
tomografía y los estudios posteriores que se publiquen son de "un
importante valor" científico.
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