martes, 24 de abril de 2012

¿Cómo era en realidad el aspecto de los dinosaurios?




Sabéis que la paleoilustración es uno de los temas que más nos gusta dentro de la paleontología .

Hoy el Diario ABC recoge un interesantísimo artículo de como la imagen de muchos dinosaurios ha sido distorsionada por películas que no respetaron demasiado como fueron estos animales en la realidad, así ocurre por ejemplo en la famosísima "Jurasic Park" de Steven Spielberg, donde  un fiero Velociraptor ocupa buena parte del metraje. Su aspecto atemorizante, de grandes dimensiones y con la piel dura y escamosa, ha pasado de esta forma para todo el mundo. Pero no es real, al menos no del todo. El famoso depredador del Cretácico era bastante más pequeño y descubrimientos posteriores han demostrado que tenía el cuerpo cubierto de plumas.

Pero, ¿Cuánto hay de realidad y cuánto de imaginación en la ilustración de algo que ningún ser humano ha visto jamás? Los paleontólogos conocen muy bien el aspecto de algunas especies cuyos restos han aparecido en abundancia y en excelente estado de conservación, pero los fósiles de otras son muy escasos y su recreación responde, obligatoriamente, a especulaciones.

Mauricio Antón, uno de los paleoartistas más prestigiosos del mundo y colaborador del Museo de Ciencias Naturales en Madrid (CSIC) dice: «Empezamos por los huesos fosilizados y vamos añadiendo capas de tejido utilizando la información que los huesos contienen hasta llegar a lo más superficial», explica. Según la calidad y cantidad de los restos fósiles, la recreación tendrá mayor o menor grado de especulación.

Rafael Royo, uno de los paleontólogos que descubrieron los restos del Turiasaurus riodevensis, el dinosaurio gigante europeo hallado en tierras de Teruel y cuyo cráneo fue presentado hace unas semanas, afirma que, en el caso de que la información sea abundante, la forma con la que los científicos dan volumen al cuerpo de los dinosaurios suele ser bastante fiel.

Además de la piel, el color es una de las características más difíciles a la hora de recrear a estos animales extintos. Generalmente, si no hay más pistas, los paleontólogos atribuyen al dinosaurio un color coherente con el entorno en el que se supone que vivía, de tal forma que, igual que ocurre ahora con otros animales en la naturaleza, pasara desapercibido o, por el contrario, si era peligroso, llamara la atención como advertencia.

Podeis leer este interesantísimo artículo completo  en ABC

1 comentario:

Anónimo dijo...

Fantástico post, muchas gracias. Muy interesante