EXCAVACIÓN 'ATENEA'
Los responsables del Museo de Dinosaurios de Salas de los Infantes visitaron el yacimiento y el Centro de Interpretación Paleontológica de La Rioja de Igea
Visita al Centro de Interpretación Paleontológica de La Rioja de Igea, observando una parte de la mandíbula de Baryonyx. / Sandra Sainz |
Además, ayer hubo una visita destacada, la del director del
Museo de Dinosaurios de Salas de los Infantes (Burgos), Fidel Torcida, y la restauradora
del mismo, Caterine Arias.
Primero acudieron a la excavación para ver sobre el terreno
cómo se desarrollan las labores de recuperación de los bloques pétreos que contienen
los huesos de dinosaurio.
Luis Viera, uno de los creadores del museo igeano, ha participado
en los trabajos de campo estos días como invitado
A continuación se trasladaron al Centro de Interpretación Paleontológica
de La Rioja de Igea donde tuvieron un guía de lujo, Luis Viera, uno de los
artífices de este museo y del libro de divulgación 'La Rioja de los
dinosaurios' junto al fallecido José Ángel Torres. Ambos son parte de la
historia de la paleontología riojana.
Con la pasión que le caracteriza, Viera explicó los
pormenores del centro, pasando por la zona de peces, flora, icnitas (huellas de
dinosaurios) y material óseo como una parte de mandíbula de Baryonyx o la
reproducción de la pata de dinosaurio, entre otras joyas del recinto igeano.
La visita siguió por los espacios no expositivos:
laboratorio y almacenes donde se conservan las rocas de los yacimientos para su
tratamiento, obtención de huesos fosilizados y estudio. También pudieron ver
piezas limpias y restauradas.
Todo ello más lo que se obtenga en la campaña actual y las
futuras (el terreno igeano se ha convertido en una fuente inagotable de restos,
por ahora), formará parte de diversas investigaciones que esperan proporcionar
importantes avances en el mundo de los dinosaurios y convertir Igea, todavía
más, en un referente nacional e internacional.
De esta manera aumentará el patrimonio riojano. Asimismo,
pretende poner en valor este recurso turístico, fuente de riqueza y de asentamiento
de población en la comarca.
Aparte de ejercer como guía, Luis Viera ha participado estos
días en los trabajos de campo en el monte de Igea como invitado. Recuerda con agrado
como aprovechaba sus vacaciones y sus recursos para venir a La Rioja y luego, a
lo largo del año, realizaba las investigaciones.
Los responsables del Museo de Dinosaurios de Salas de los Infantes visitaron el yacimiento y el Centro de Interpretación Paleontológica de La Rioja de Igea. / SANDRA SAINZ |
Torcida ha trabajado en distintos yacimientos de huellas
como La Era del Peladillo de Igea y en la excavación de 'Prejanopterus'.
Además, realizará colaboraciones con el equipo igeano a
través de dos de sus investigadores: Xavier Pereda y Erik Isasmendi.
Luis Viera | Paleontólogo de la Sociedad de Ciencias
Aranzadi
«Nadie se hace idea del enorme potencial que tiene esta
zona»
«He estado 40 años vinculado a la paleontología en La Rioja.
Comenzamos en Munilla en 1977 y publicamos el primer trabajo en 1979. Es una
pasión que ahora, con la edad y los achaques, resulta dura», dice Luis Viera.
«Nadie se hace una idea del enorme potencial que tiene esta
tierra. El problema es que, a diferencia de las huellas, que son relativamente fáciles
de ver, encontrar huesos es muy complicado porque están dentro de la roca. Esto
dificulta además su extracción», afirma Viera.
«Solo en La Rioja hablamos de una zona geológica de 800
kilómetros cuadrados en superficie que aumenta porque no es plana, tiene pliegues.
Hay que tener a gente especializada para conseguir resultados», termina.
Fidel Torcida | Director Museo de Dinosaurios Salas de los Infantes
«Resulta fundamental que haya una inversión continua»
«La Rioja ha sido un lugar de referencia en España por sus
huellas de dinosaurios. Las características de las rocas no eran favorables
para la conservación de huesos, pero el trabajo que se está haciendo aquí desde
hace años ha cambiado mucho el panorama», explica Fidel Torcida.
«Ahora se está rematando de una forma muy interesante, como
es acompañar la información de las icnitas con la que proporcionan los restos
óseos. Teníamos sus huellas y ahora tenemos a los culpables», indica el
paleontólogo y añade que «los resultados no se van a ver de inmediato,
requieren muchas horas con personas especializadas para preparar los fósiles y
estudiarlos. Resulta fundamental que haya una inversión continua».
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