Un análisis de fósiles del mayor dinosaurio depredador conocido que vagó por la Tierra, Spinosaurus aegyptiacus, sugiere que fue un azote en zonas costeras pero no un asesino de aguas profundas.
El Spinosaurus probablemente se mantenía sobre sus patas traseras, con huesos densos adecuados para caminar erguido. - JAMES GURNEY |
En aquel momento, Spinosaurus fue descrito como un
depredador "semiacuático" que merodeaba por la orilla de los ríos del
Cretácico, vadeando las orillas fangosas para emboscar a los peces con sus
enormes mandíbulas de cocodrilo y sus dientes entrelazados.
Descubrimientos más recientes han alejado al Spinosaurus de
la costa, y algunos investigadores sugieren que estaba bien adaptado para
perseguir a sus presas fuera de las aguas poco profundas y cazar bajo el agua.
Estos argumentos se basan en nuevos fósiles que sugieren que el Spinosaurus
tenía una cola carnosa parecida a un remo para nadar y huesos densos que le
ayudaban a sumergirse bajo el agua.
Sin embargo, un nuevo trabajo de paleontólogos de la
Universidad de Chicago y colegas de otros lugares rechaza esta "hipótesis
acuática" por inverosímil. Utilizando reconstrucciones virtuales
actualizadas de su esqueleto y masa corporal basadas en sus fósiles, analizaron
su capacidad para propulsar su prodigiosa masa bajo el agua y descubrieron que,
si bien el Spinosaurus era realmente el azote de la costa con muchas
adaptaciones para la vida al borde del agua, fracasaría como depredador totalmente
acuático, ágil y subacuático.
"¿Creo que este animal se metía en el agua con
regularidad? Absolutamente, pero no creo que fuera un buen nadador, ni capaz de
un comportamiento de inmersión completa", dijo en un comunicado Paul
Sereno, profesor de biología del organismo y anatomía en UChicago y autor
principal del nuevo estudio que co-dirigió el descubrimiento inicial de
Spinosaurus en 2014. "Esto simplemente no es un animal que en sus sueños
más salvajes sería dinámico por encima del agua como un nadador, y mucho menos
bajo el agua".
El estudio se publica en la revista eLife.
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